Para los aficionados al tenis menos habituales, Nuno Borges no es el nombre más conocido. Sin embargo, es un jugador a tener muy en cuenta. El portugués defiende los puntos de los octavos de final en el Open de Australia y también alcanzó esta ronda en el US Open. Por lo tanto, es un hombre muy serio en torneos de Grand Slam en pista dura.
En Melbourne derrotó a Maximilian Marterer y Alejandro Davidovich Fokina en sets corridos, tumbó a Grigor Dimitrov y cayó ante Daniil Medvedev en 4 sets. En Flushing Meadows, derrotó sin mayores dificultades a Federico Coria y Thanasi Kokkinakis, se llevó un auténtico thriller de cinco sets contra Jakub Mensik y volvió a perder frente a Medvedev, en esta ocasión por paliza.
En este Abierto de Australia ya ha derrotado a Alexandre Muller, tenista en forma que ha ganado en Hong Kong en el inicio de temporada, y al local Jordan Thompson, que jugó el mejor tenis de su vida en 2024, perdiendo solamente el primer set contra el francés y ganando los seis últimos de manera consecutiva.
Por lo tanto, Carlos Alcaraz no tendrá una tarea sencilla. El murciano llega en un estado de forma espectacular, tras haber arrasado con Alexander Shevchenko y Yoshihito Nishioka en las dos primeras rondas del evento, perdiendo únicamente 12 juegos, una media de dos por set. Especialmente contra el japonés, estuvo tremendo con su nuevo servicio.
Borges es un jugador sólido desde el fondo de la pista, aunque en principio no tiene nada que hacer con la velocidad y la potencia del número 3 del mundo. Alcaraz tendrá que volver a estar muy preciso con el saque y repartiendo misiles de derecha y de revés, seguir variando el juego con dejadas, atrayendo a su rival a la red y superando por arriba después.