Venus Williams, icono de la WTA, no está lista para colgar la raqueta, se autodenomina en broma "rehabilitadora profesional" mientras lucha contra las lesiones en el ocaso de su carrera.

La ex número 1 del mundo dio otra sorpresa el lunes en el Cincinnati Open, al derrotar a la número 16 del mundo Veronika Kudermetova en sets corridos para avanzar a la segunda ronda.

"Siempre bromeo diciendo que soy una rehabilitadora profesional, no una deportista profesional", declaró Williams tras el partido. "Necesitaba un descanso de la rehabilitación. Así que me tomé un par de meses de descanso (tras su lesión en Nueva Zelanda a principios de año).

"Estaba en Francia y tenía un chófer y pasé por delante de Roland Garros. Me dije, tío, eso parece divertido. Estaba en París e intenté encontrar una raqueta. Serena tiene un local allí, así que encontré sus zapatillas y su raqueta y entonces me sentí preparada para volver a hacerlo.

"Así que justo después de Wimbledon, volví directamente a rehabilitación. Me sentía como Amy Winehouse... ¡No me quiero ir!"

La jugadora de 43 años disputará a finales de este mes el US Open, en el que es bicampeona tras ganar en 2000 y 2001, superando a su hermana menor en este último año.