Naomi Osaka se impuso a la italiana Elisabetta Cocciaretto por 6-3 y 6-4 en el Miami Open. Osaka, una megaestrella mundial del tenis, sintió su efecto después del partido, cuando se reunió con una fan que lloraba y tenía una muñeca Barbie hecha a mano de la ex número uno del mundo. Al acercarse a ella, la aficionada estaba llorando y no podía creer que se estuviera reuniendo con Osaka..
En su entrevista posterior al partido, Osaka afirmó que era el momento en el que más libre se había sentido desde su regreso a la competición, en el que la as japonesa sigue dando pasos adelante para volver a su mejor nivel. Una marca que creía que iba a alcanzar como pronto hacia Roland Garros y Wimbledon.
"Sinceramente, ésta es probablemente la vez que más libre he podido golpear mis pelotas, lo más parecido a la sensación que quiero captar de cara al futuro", declaró Osaka. "Diría que éste ha sido probablemente mi mejor partido en cuanto a golpeo. Sentí que las bolas que quería golpear estaban ahí. Estoy bastante contenta con éste".