La ex número 2 del mundo,
Ons Jabeur, ha manifestado en reiteradas ocasiones su apoyo a Palestina en medio del conflicto con Israel. La tres veces finalista de Grand Slam no ha dudado en alzar la voz sobre la situación en Gaza y, desde febrero de 2024, es embajadora del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
La tenista tunecina se ha convertido en un referente para el tenis africano y el mundo árabe, siendo la jugadora árabe más exitosa de la historia. Es la única tenista árabe, hombre o mujer, que ha logrado entrar en el Top 10 del ranking mundial, y a menudo utiliza su plataforma para hablar y apoyar causas humanitarias en su región.
En los últimos años, Jabeur ha asumido un rol cada vez más activo en iniciativas vinculadas a causas humanitarias y de género. Ya en 2023, en plena guerra en Gaza, decidió donar parte del premio económico de las Finales de la WTA para ayudar a la población palestina. “Es desgarrador. He decidido donar parte del dinero de mi premio para ayudar a los palestinos. No puedo estar contenta con esta victoria. No es un mensaje político, es humanidad. Quiero la paz en este mundo. Eso es todo”, declaró entonces.
En una entrevista reciente con la WTA, Jabeur volvió a referirse a las atrocidades cometidas en Palestina y reconoció que su activismo ha tenido consecuencias personales. “Intentan ejercer presión, pero, por desgracia, cerrar las fronteras e intentar matar de hambre a los niños y a muchas otras personas es muy inhumano. Estamos en 2025 y no puedo creer que esto esté ocurriendo”, afirmó.
“El mundo es terrible en estos momentos, y no sé qué está pensando la gente. Es algo que me ha afectado profundamente. Me han llamado terrorista varias veces”, lamentó la dos veces subcampeona de Wimbledon. “Ni siquiera veo la conexión. Intento ayudar a la gente, especialmente a los niños, que se mueren de hambre. No es normal”.
Jabeur tenía previsto debutar este jueves en el Abierto de Roma frente a la bicampeona de Grand Slam Petra Kvitova, quien había logrado su primera victoria desde octubre de 2023 en el Abierto de China. La checa, que volvió a la competición en 2025 tras su maternidad, superó a Irina-Camelia Begu en primera ronda, pero se vio obligada a retirarse por problemas físicos antes de enfrentar a Jabeur en segunda ronda.