Nueva reina de las WTA Finals: una impecable Elena Rybakina domina a Aryna Sabalenka en Riad

Elena Rybakina se coronó nueva campeona de las WTA Finals tras derrotar a la número 1 del mundo, Aryna Sabalenka, por 6-3, 7-6(0), negándole a la bielorrusa el título de fin de año una vez más.

La kazaja había caído en la Fase de Grupos en sus dos participaciones anteriores, pero esta vez firmó una campaña impecable y aseguró su tercer título de la temporada. La kazaja cierra el curso como número 5 del mundo.

Por décimo año consecutivo hay nueva campeona en las WTA Finals, y Rybakina lo logra con un recorrido perfecto, derrotando a cuatro Top-5 en el camino. La racha de victorias de Rybakina se extiende a 11 consecutivas y recorta ligeramente el cara a cara, con Sabalenka aún al frente por 8-6 hasta ahora.

En cuanto a la número 1 del mundo, Sabalenka cierra una gran temporada con su novena final en 2025 (incluidos 4 títulos) y termina como número 1 con una ventaja considerable sobre sus perseguidoras. La bielorrusa vuelve a irse de vacío, pese a alcanzar al menos las semifinales en sus cuatro últimas participaciones consecutivas en las WTA Finals.

Fue el 14.º enfrentamiento entre Sabalenka y Rybakina y la 4.ª final entre ambas (con balance previo de 2-1 a favor de la kazaja). Rybakina exhibió desde el inicio el alto nivel que arrastraba de las últimas semanas del año. La kazaja dispuso de la primera opción de quiebre —en el juego inicial al saque de Sabalenka—, pero la bielorrusa resistió.

Las dos generaron oportunidades a lo largo del set, pero Rybakina fue más precisa en los momentos clave. La kazaja salvó 3 bolas de break en contra y aprovechó 1 de las 2 que dispuso. La ex campeona de Wimbledon ganó el 64% de los puntos con su servicio antes de cerrar el set por 6-4 tras 45 minutos.

Ya en el primer set se percibía la frustración de Sabalenka, atrapada entre sus errores y el gran planteamiento de Rybakina, que se negó a intimidarse ante la potencia rival. Fue un duelo de pegadoras, donde Rybakina mostró mejores herramientas en los peloteos y mayor eficacia al saque. La presión se hizo visible sobre Sabalenka en el segundo set, con su oponente sin aflojar.

A los pocos juegos del segundo parcial, Sabalenka ya había salvado dos bolas de break, mientras Rybakina sostuvo sin apuros sus primeros nueve turnos de servicio. La número 1 del mundo, por su parte, mostró convicción para avanzar pese a la frustración y consiguió mantener el saque durante varios juegos, llegando 4-4 sin grandes sobresaltos.

Entonces aumentó la tensión: Sabalenka afrontó un 15-40 en el noveno juego pero sostuvo. Acto seguido, Rybakina encaró un 15-40 (dos bolas de set para su rival) y volvió a salir ilesa. Todo se decidió en el tie-break, donde una ventaja temprana para la kazaja con un mini-break inicial le dio confianza para buscar la victoria. Rybakina estuvo clínica ante una Sabalenka errática y terminó cerrando por 6-3, 7-6(0).