Del abismo a campeona: la ganadora del último torneo WTA de 2025 sella una historia de regreso

La No. 155 del mundo, Anhelina Kalinina, conquistó el último título de la temporada tras superar a la francesa Elsa Jacquemot, No. 59 del mundo y segunda cabeza de serie del torneo, en la final del WTA 125 de Limoges. Fue un duelo ajustado en el que remontó desde 3-5 en el tercer set, cerrando la victoria por 6-3, 4-6, 7-5.

La ucraniana, de 28 años, buscaba alzar el título en Limoges por segunda vez—que había sido su único trofeo a nivel Challenger hasta ahora, en 2022 ante Clara Tauson. Desde entonces, Kalinina había disputado dos finales: WTA 250 Budapest 2021—derrotada por Yulia Putintseva (4-6, 0-6)—y la final del Rome Open 2023, donde se retiró ante Elena Rybakina al inicio del segundo set (4-6, 0-1, ret.).

Esta vez, Kalinina firmó una semana notable encadenando cinco triunfos consecutivos para asegurar el título por segunda ocasión en Limoges. En el camino, derrotó a cuatro de las cinco primeras cabezas de serie—un total de cuatro rivales dentro del top 85—lo que supondrá un importante avance en el ranking del No. 155 al No. 127, dándole la opción de ser una de las cabezas de serie en la qualy del Australian Open.

La ex No. 25 del mundo había iniciado el año dentro del top 50—por cuarto año consecutivo—pero resultados irregulares en la primera parte de la temporada, y una lesión durante la gira de tierra batida, terminaron por apartarla de la competición durante más de 6 meses desde su última aparición en el WTA 125 Bari a comienzos de junio. Kalinina había salido del top 100 alrededor de mayo de este año y del top 150 en septiembre, y peleaba por sumar puntos en el tramo final de la temporada.

El recorrido de Kalinina comenzó superando a la liechtensteiniana Kathinka Von Deichmann (No. 222), para luego avanzar en ajustados duelos a tres sets ante la No. 74 del mundo Sonay Kartal (7-6(4), 1-6, 6-1) y la No. 85 del mundo Alycia Parks por 7-5, 1-6, 6-3. Ya en semifinales, sorprendió a la primera preclasificada Cristina Bucsa (No. 54) por 6-4, 6-3, mientras que en la final terminó imponiéndose a la segunda cabeza de serie, Elsa Jacquemot.

Kalinina, que habitualmente ha destacado más por sus resultados en tierra batida que en otras superficies, venía de una buena semana al servicio, manteniendo su porcentaje de primeros saques por encima del 67% en todos sus partidos de la semana, y ganando al menos el 66% de esos puntos. Su duelo de segunda ronda ante Kartal había sido, con diferencia, el más complicado en su camino a la final, donde superó las dos horas de juego y salvó 13/17 bolas de break a lo largo del encuentro.

Sin embargo, ante Jacquemot, las cosas volverían a complicarse durante las más de dos horas y media de juego. El primer set comenzó con un quiebre en contra y la francesa tomó rápidamente la delantera hasta el 3-1. No obstante, llegaría la reacción de la ucraniana; afinó el saque y encadenó cinco juegos consecutivos—incluidos dos breaks—para remontar la manga y adelantarse 6-3.

Kalinina logró mantener el impulso al inicio, con un quiebre de arranque y avanzando 2-0—sumando una racha de 7 juegos seguidos. Sin embargo, Jacquemot encontraría una reacción para nivelar de nuevo, devolviendo el break unos juegos más tarde. Tras un segundo set parejo, Jacquemot consiguió el quiebre en la parte final, aprovechando los problemas al saque de Kalinina para asegurar el segundo break del set en el décimo juego e igualar con un 6-4 que llevó todo al tercer set.

En un inicio equilibrado, ninguna logró siquiera una bola de break durante buena parte del set y la francesa se puso 4-3 arriba sin oportunidades de quiebre disputadas hasta ese momento. Kalinina titubeó y la francesa tomó ventaja 5-3, dándose la opción de sacar para cerrar el triunfo, pero que finalmente no pudo aprovechar.

Kalinina mostró convicción en la parte final del partido y aprovechó la presión sobre su rival para adueñarse del duelo en los últimos juegos. La ucraniana ganó 16 de los últimos 21 puntos disputados y encadenó cuatro juegos seguidos, lo que le permitió remontar en el tercer set y asegurar el triunfo por 6-3, 4-6, 7-5, alzando su segundo título WTA 125 de su carrera, y cerrando la temporada retomando el rumbo tras unos meses complicados lejos de las pistas.