Lamentable estrategia del Open de Australia: Alcaraz, Djokovic y Kyrgios; jugando a la vez

El Open de Australia 2025 continúa en lo que se ha dado en llamar Manic Monday (lunes maníaco), y es maníaco de verdad por una razón, sólo por la Sesión Nocturna en Melbourne. Tres de los principales nombres del torneo masculino juegan exactamente a la misma hora.

Se ha vuelto a cuestionar la programación, ya que, aunque el día extra ayuda a repartir el juego, también significa que Novak Djokovic, Nick Kyrgios y Carlos Alcaraz, todos ellos grandes nombres deseados en horario de máxima audiencia, tienen que repartirse entre diferentes pistas, lo que supone una pesadilla tanto para el torneo como para las cadenas de televisión.

Djokovic quizás era visto como candidato a no jugar en la Rod Laver Arena dado el regreso de Kyrgios por primera vez en dos años y Alex de Minaur por ejemplo flanqueará el horario mañana junto a Olivia Gadecki como dúo de esperanza en casa. Pero en su lugar han optado por su campeón más laureado.

Mientras que Alcaraz se enfrenta a Alexander Shevchenko en el Margaret Court Arena. Quizás el más fácil de colocar del trío. La mitad de esta pesadilla se debe a que ahora es el tercer cabeza de serie.

Leer más

Centro Open de Australia 2025: Calendario, resultados, premios y guía de TV

El hecho de que Alexander Zverev le haya usurpado ha provocado un problema no deseado, ya que Zverev juega ahora en días alternos, que son menos apilados, y esto significa que Alcaraz y Djokovic se sientan ahora en la sección de los pecadores. El italiano prefiere jugar por la mañana, lo que facilita las cosas a los organizadores.

Mientras que Iga Swiatek y Coco Gauff, las dos mejores mujeres en acción hoy tampoco quieren jugar la Sesión Nocturna por lo que le toca a Naomi Osaka enfrentarse a Caroline Garcia en la Rod Laver Arena después de Novak Djokovic.

Pero también es otro ejemplo de cómo el tenis se perjudica a sí mismo, ya que los que quieren ver los tres partidos no pueden hacerlo. A menudo, las finales también han sido un problema, ya que semana tras semana todas las finales se programan a la misma hora. Puede que sea un lunes maníaco, pero es más bien una pesadilla, ya que los aficionados, tanto en los estadios como en casa, tienen que decidir a quién ver;