Novak Djokovic ha afirmado que superó su derrota en la final de
Wimbledon de este año "en un día", mientras se prepara para competir en el
Cincinnati Open en Ohio. El 23 veces campeón de Grand Slam sufrió una sorprendente derrota el mes pasado contra
Carlos Alcaraz. Era el cuádruple defensor del título y cuenta con siete victorias en este torneo, pero perdió ante el número 1 del mundo en un emocionante partido a cinco sets.
La derrota fue especialmente dolorosa para el jugador de 36 años por el hecho de que, de haber ganado, habría igualado el récord de ocho victorias de Roger Federer en Wimbledon. En vísperas del Masters de Cincinnati, Djokovic habló con la ATP sobre aquella monumental final, afirmando que lamentaba algunos aspectos de su actuación.
"Por supuesto, me arrepentí de no haber aprovechado las oportunidades durante esa final. Tuve varios puntos de set en el segundo y sentí que estaba cerca de ponerme por delante. Y luego, obviamente, algunos puntos de ruptura en el quinto", dijo.
El serbio se deshizo en elogios hacia su joven oponente: "Fue un partido reñido, pero merecido por su parte, porque para ganar jugó mejor en los momentos importantes, y eso es lo que dije después de la final. Creo que fue un merecido ganador y eso es todo, más o menos. Hay que seguir adelante", añadió.
El número 2 del mundo subrayó que no se aferraba a lamentarse por el partido: "No es ni el primer ni el último partido que pierdo, así que se me pasó en un día. Necesitaba descansar y pasar tiempo con mi familia, y eso es lo que hice", declaró.
Tras su derrota en el torneo sobre hierba, Djokovic se tomó un descanso para descansar y pasar tiempo con su familia. La semana pasada se retiró del Open de Canadá debido a la fatiga, pero ha vuelto al torneo ATP 1000 de Cincinnati como parte de su preparación para el US Open.