Jannik Sinner rompe el silencio: su regreso al Masters de Roma tras la sanción por dopaje

El italiano Jannik Sinner ha reconocido que su regreso al Masters de Roma no será sencillo. El tenista de 23 años, considerado uno de los máximos referentes del circuito junto al español Carlos Alcaraz, cumple actualmente una sanción de tres meses, resultado de un acuerdo con la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) tras no superar dos controles en marzo del año pasado.

La suspensión del actual número uno del mundo concluirá apenas unos días antes del inicio del ATP 1000 de Roma, certamen que marcará su retorno oficial a la competición desde que conquistó el Abierto de Australia, donde superó al número dos del ranking, Alexander Zverev, en sets corridos con un marcador de 6-3, 7-6, 6-3.

En su primera entrevista desde que aceptó la sanción, concedida a Sky Sports Italia y recogida por Tennis 365, Sinner habló con honestidad sobre lo complicado que ha sido afrontar este parón forzoso. También reflexionó sobre las emociones vividas tras aceptar el castigo y lo que ha significado este proceso para su desarrollo personal.

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"Me encuentro muy bien, he descansado y me siento tranquilo", declaró. "Habría preferido hacer muchas cosas de forma distinta. Naturalmente, si hubiera podido elegir, habría seguido compitiendo. Pero estoy en paz, y ahora mismo no pienso demasiado en ello".

El campeón de Grand Slam añadió que necesitó tiempo para volver a sentirse pleno. “Tras tomar la decisión, pasaron días antes de que pudiera reencontrarme conmigo mismo. Todavía estoy en proceso de asimilarlo todo, pero tengo muchas ganas de volver a competir en Roma. Es un torneo muy especial, aunque sé que será exigente. Volveré en un contexto cargado de atención, y en Italia eso se siente mucho”.

Sinner no ocultó lo que supuso emocionalmente este episodio. “Me sentí vulnerable después de lo ocurrido. Sería falso decir que no me afectó. No soy una persona sin emociones ni sensibilidad. Cada año aprendo algo nuevo sobre quién soy y sobre el valor que tengo. No ha sido sencillo; hubo momentos realmente complicados, pero las personas que tengo a mi lado me dieron el impulso necesario para comprender mejor lo que sucedió”.