Fritz ve en 'Break Point' la herramienta perfecta para hacer crecer aún más el tenis: "Es lo que necesitamos, especialmente en Estados Unidos"

Taylor Fritz y Maria Sakkari, seguidos por un equipo de cámaras de Netflix vestidos de negro, fueron recibidos con un caluroso aplauso cuando subieron al escenario al aire libre en los terrenos del Indian Wells Tennis Garden el martes. Las estrellas de Break Point Episodio 3 llegaron apenas unas horas después de que Netflix anunciara que habría una segunda temporada.

Esos omnipresentes trabajadores están por todas partes en "Tennis Paradise", captando momentos entre bastidores para los episodios que se verán el año que viene.

"Estamos muy emocionados", declaró antes Paul Martin, productor ejecutivo de Box to Box Films. "Emocionados por poder participar en este espacio un año más. Ojalá continúe durante 10 temporadas más".

Fritz, cuyo dramático camino hacia el título en su torneo local -venció a Rafael Nadal en la final con un tobillo seriamente comprometido- fue el hilo dominante del episodio, estuvo de acuerdo.

"Es bueno verlo porque se trata de gente que no es aficionada al tenis", dijo Fritz. "Especialmente en Estados Unidos, eso es lo que necesitamos. Cada vez que alguien dice: 'Oh, te he visto en Break Point', lo veo como alguien que podría ser aficionado al tenis. Lo que ha hecho por este deporte es genial. Espero que continúe".

Los cinco primeros episodios de la serie se estrenaron antes del Open de Australia, y los episodios 6-10, que cubren la segunda mitad de la temporada 2022, se emitirán en junio. Los primeros resultados son alentadores. Break Point alcanzó el Top 10 en 28 países, con una audiencia de más de 15 millones de espectadores, con Australia y el Reino Unido a la cabeza.

Aunque no alcanzó el Top 10 en Estados Unidos, dada su gran población, generó el mayor número de nuevos fans. Los jugadores destacados experimentaron un importante rebote en sus cifras en las redes sociales.

"El tenis, al estar de gira, es una gran historia que contar", dijo Fritz, cuyo número 5 en la clasificación ATP es el más alto para un estadounidense desde Andy Roddick en 2009. "Porque lo que hacemos es una locura y mucha gente no conoce los entresijos, los viajes, las competiciones y todo lo que ocurre. Me alegro de que la acogida haya sido genial".