“Estoy orgulloso de ser italiano”: Jannik Sinner aborda ausencia en la Copa Davis

El No. 2 del mundo, Jannik Sinner, sigue inmerso en el trabajo de pretemporada, preparando el inicio del año en la gira australiana, donde comenzará la defensa del primer grande de la temporada en el Australian Open.

El cuatro veces campeón de Grand Slam decidió no participar en las Finales de la Copa Davis de este año, donde Italia revalidó el título por tercer año consecutivo—esta vez sin las grandes figuras Sinner y Lorenzo Musetti. En su ausencia, Flavio Cobolli y Matteo Berrettini dieron un paso al frente para entregar el tercer trofeo seguido al equipo italiano.

Hubo críticas significativas dirigidas a Sinner tras anunciar su baja de las Finales de la Copa Davis. El No. 2 del mundo explicó que, después de competir en las ATP Finals, su prioridad era tomarse el tiempo necesario para recuperarse y descansar de cara a la temporada 2026. La ausencia de Sinner en Bolonia—donde Italia era nación anfitriona—provocó varias reacciones críticas, incluida la de la leyenda italiana Nicola Pietrangeli.

Sin embargo, en una reciente entrevista con Sky Sports Italy, Sinner abordó tanto su ausencia como su orgullo por representar a Italia: “Estoy orgulloso de ser italiano. Cuando atravesamos momentos difíciles, sabes que no juegas solo para ti; juegas para toda una nación, un pueblo que te apoya. En Italia hay una enorme pasión por el deporte, no solo por el tenis, sino también por la Fórmula 1 y el fútbol. Hay que sentirse orgulloso de ello y seguir adelante.”

Sinner ha aprendido a aislarse del ruido externo apoyándose mucho en un círculo íntimo muy unido. La pretemporada ofrece una rara oportunidad para reconectar con esas figuras lejos de las cámaras y del ritmo implacable de viajes del ATP Tour. Para Sinner, la retroalimentación técnica sobre su saque o su derecha importa, pero es secundaria frente a la honestidad necesaria para mantener con los pies en la tierra a un deportista millonario.

“Es crucial contar siempre con el apoyo de todo el equipo: personas honestas que te digan cuando estás haciéndolo bien, pero también cuando las cosas no van tan bien o cuando hay que hacer cambios. Aún soy joven, y para mí es muy importante rodearme de personas con fuertes valores humanos, como quienes trabajan conmigo y mi familia.”

El italiano entiende que uno de los grandes retos de 2026 será imponerse en su rivalidad con Carlos Alcaraz—su mayor oponente hasta la fecha, que ya le ha negado varios grandes, incluido Roland Garros y el US Open. A los 24 años, Sinner no ve la rivalidad como una distracción, sino como una necesidad estructural para progresar.

“Las rivalidades son esenciales”, dijo Sinner. “Los rivales con los que pierdes o a los que te enfrentas más a menudo se convierten en los puntos de referencia más importantes para mejorar y seguir trabajando, para derrotarlos o para encontrar formas de hacer constantemente algo diferente. Cuantas más rivalidades haya, más divertido y atractivo será para los espectadores seguir el deporte.”

Mientras se permite un breve periodo de relajación, Sinner es plenamente consciente del desafío que le espera. La diferencia entre el No. 1 y el No. 2 del mundo suele ser mínima, dictada por la regularidad y la resistencia física. Admite que mantener su posición actual exigirá un esfuerzo implacable y subraya que estancarse es el camino más rápido hacia atrás.

“El nivel es cada vez más alto, y mejorar es esencial. Si quieres mantener el mismo ranking el próximo año o mejorarlo, tienes que seguir trabajando y exigirte al máximo.”