“Espero volver al top 100”: Stan Wawrinka fija su ambicioso objetivo para 2026 antes de su regreso a Auckland

Stan Wawrinka inicia 2026 con claridad, propósito y una determinación que desafía el paso del tiempo. Cerca de los 41 y entrando en su 25ª temporada en el circuito, la estrella suiza sigue marcándose objetivos que lo motivan cada día. De nuevo fuera del top 150, Wawrinka ha replanteado el año no como una despedida, sino como un nuevo reto, con un objetivo por encima del resto: volver al top 100 y demostrar que aún pertenece a la élite del deporte.

Su historia de 2026 empieza en Auckland, un destino que no visitaba desde 2007. El ASB Classic será su estreno de temporada, un escenario que mezcla nostalgia y oportunidad. Es una decisión que sorprendió a los aficionados, pero encaja a la perfección con su mentalidad: buscar torneos con significado, grandes atmósferas y esa chispa emocional que lo activa en modo competitivo. Auckland, con su cercanía y conexión con el público, ofrece exactamente eso.

“La última vez que jugué en Auckland fue hace 20 años. Fue una gran experiencia. No he tenido la oportunidad de volver desde entonces, pero estoy muy feliz de regresar. Decidí venir este año para tener la posibilidad de jugar en Auckland otra vez delante de mis aficionados. Recuerdo la atmósfera increíble que había allí y tengo muchas ganas de estar. Me encanta la competición.”

Las palabras de Wawrinka revelan algo más que sentimentalismo. Su regreso es una elección calculada para arrancar 2026 en un lugar donde la pista se adapta a su juego, las condiciones le son familiares y el ambiente alimenta su intensidad. En términos de ranking, Auckland ofrece una oportunidad real: una buena semana podría aportar puntos valiosos al inicio del año, ayudándole a construir impulso hacia su objetivo de top 100.

Wawrinka entra en la temporada con razones objetivas para el optimismo. Su tramo final de 2025 en el Hellenic Championship incluyó una victoria ante Botic van de Zandschulp y un duelo ajustado con Lorenzo Musetti, pruebas de que aún puede exigir físicamente y tácticamente a jugadores del top 50. Estos resultados, combinados con una pretemporada limpia y un calendario cuidadosamente estructurado, le dan la base para perseguir su meta de ranking durante la primera mitad del año.

“Para mí, todo tiene que ver con la competición. También es una oportunidad para exigirme, alcanzar mi máximo potencial, dar lo mejor de mí”, afirmó el ex número 3 del mundo. “Sigo entrenando duro para estar en plena forma durante los torneos y los partidos. Espero volver al top 100 en 2026, participar en torneos importantes, continuar progresando y ver dónde estoy al final del año. Incluso después de 20 años en el circuito, sigo amando este deporte igual. Me apasiona el tenis y las emociones que siento al jugar en diferentes ciudades y en distintos torneos.”

Volver al top 100 no es solo simbólico—es práctico. Le daría acceso directo a Grand Slams y torneos ATP 250 y reduciría su dependencia de invitaciones. Estadísticamente, necesita alrededor de 550–650 puntos a lo largo de la temporada, alcanzables con algunas buenas actuaciones en ATP 250 o con unas cuantas victorias en torneos mayores. Con una planificación estratégica y una gestión cuidadosa de las cargas, el objetivo es exigente pero factible.

El triple campeón de Grand Slam volverá al ASB Classic en Auckland, 20 años después de su última participación. Entonces llegó como 8º cabeza de serie y cayó en primera ronda ante el español Nicolas Almagro. De aquel cuadro, solo queda un jugador activo además de Stan: el francés Gael Monfils, que precisamente es el vigente campeón en esta edición.

“Gael es un gran amigo, es un campeón increíble, un tenista extraordinario, una persona excepcional. Nos conocemos desde hace muchos años, hemos jugado muchas veces el uno contra el otro. Así que siempre me alegra verlo triunfar en los torneos. El año pasado fue increíble lo que logró en Auckland y ojalá podamos enfrentarnos una vez más.”

Monfils apunta precisamente a regresar a Auckland en una temporada en la que prepara su vuelta. Mientras Wawrinka es actualmente el jugador más veterano del Tour con 40 años, Monfils es el segundo más veterano con 39. En su cara a cara, el francés domina 4–3, con triunfos en la final de Rotterdam 2019 y en un cruce de segunda ronda en Wimbledon 2024, donde Monfils ganó en sets corridos.