Andrey Rublev llegaba al
Madrid Open con cuatro derrotas consecutivas sin ni siquiera haber ganado un set, en su peor momento tenístico desde que se consolidase como uno de los mejores jugadores del mundo y más regulares del circuito. En la capital español se alzó con el título tras remontar a
Felix Auger-Aliassime para imponerse por 4-6, 7-5 y 7-5, conquistando el segundo ATP Masters 1000 de su carrera, ambos sobre tierra batida.
En una final entretenida, el canadiense demostró una gran resistencia a pesar de la superioridad de Rublev durante gran parte del partido. Rublev, de 26 años, cuenta ahora con 16 títulos como profesional, 6 de ellos en tierra batida, y ascenderá al número 6 del mundo.
Inesperados finalistas en la Caja Mágica
El canadiense tuvo suerte en su camino hacia la final, ya que en la tercera ronda recibió una descalificación contra Jakub Mensik tras jugar sólo un set. Luego, en cuartos de final, su rival, el primer cabeza de serie Jannik Sinner, decidió no jugar por problemas de cadera, y un día después, sólo jugó seis juegos contra Jiri Lehecka en semifinales antes de retirarse también.
Rublev (7º cabeza de serie) también dejó atrás una mala racha tras cuatro derrotas consecutivas antes de llegar a Madrid. Esta semana, el ruso de 26 años eliminó al segundo cabeza de serie y bicampeón defensor Carlos Alcaraz en su camino y luego derrotó al estadounidense Taylor Fritz en semifinales.
Rublev logra su segundo título de Masters 1000
Rublev llegaba como el jugador con más experiencia en estas lides, marcando su quinta final de Masters 1000, y tenía un ligero favoritismo sobre su rival. El ruso demostró nervios al ceder su primer juego de servicio sin ganar un punto, lo que dio a su rival una ventaja significativa.
Rublev llevaba 4 derrotas consecutivas antes de Madrid
Auger-Aliassime mantuvo la ventaja durante algunos juegos de servicio y amenazó el saque de su rival con algunos puntos de break a su favor. El canadiense consiguió el segundo break y se puso 4-1 arriba, aunque Rublev lo recuperó inmediatamente, no fue suficiente para darle la vuelta al set, y Felix consiguió mantener la ventaja y se llevó el set por 6-4.
A medida que avanzaba el partido, Rublev aflojó su servicio y mejoró las sensaciones de los primeros juegos, que fueron totalmente favorables a Auger-Aliassime. El canadiense tenía un 77% de primeros servicios y ganaba el 67% de ellos, mientras que Rublev tenía un 66% de primeros servicios y ganaba el 62% de ellos. Sin embargo, los 14 golpes ganadores y 5 errores no forzados de Auger-Aliassime marcaron claras diferencias frente a los 5 golpes ganadores y 4 errores no forzados de su rival.
En este segundo set, la presión volvió a estar del lado de Rublev, que parecía mucho más tranquilo desde el servicio pero no conseguía mucho desde la devolución. El set transcurrió sin sobresaltos para ambos, en el sexto juego Auger-Aliassime salvó un punto de break en su contra, y cada vez era más evidente que Rublev estaba más cerca de tomar la delantera. Cuando el desempate parecía inminente, Rublev dispuso de un par de oportunidades de ruptura y acabó adjudicándose el set por 7-5, mostrándose cada vez más superior a su rival.
El tercer set continuó con Rublev ganando con facilidad sus juegos al servicio mientrasAuger-Aliassime luchaba por seguir el ritmo de su rival. El canadiense salvó puntos de quiebre en su contra en la mayoría de los juegos de servicio pero se mantuvo vivo ante un impecableRublev que por momentos se volvió prácticamente injugable para su oponente.
Con 5-6 en contra, la presión fue excesiva para Auger-Aliassime, que cedió el primer punto de partido y cometió una doble falta que le dio el título a Rublev por 4-6, 7-5 y 7-5. Con esta victoria, Rublev alcanza el número 6 del mundo, amplía su enfrentamiento directo con Auger-Aliassime a 5-1 y suma 16 títulos en su carrera.