El experimentado tenista francés Adrian Mannarino elige "dudar" respecto a la inocencia de Jannik Sinner e Iga Swiatek en los casos de dopaje que conmocionaron al mundo del deporte esta temporada. Ambos números 1 dieron positivo pero recibieron sanciones menos severas que otros jugadores en la misma situación, lo que generó la desconfianza del veterano de 36 años y no le tembló el pulso al dar su opinión.
El caso de Sinner se atribuyó a la contaminación de un analgésico con Clostebol, que su fisioterapeuta utilizaba para los cortes en los dedos. Al tratar a Sinner sin guantes, la sustancia habría entrado en el organismo del italiano. Por otra parte, Swiatek dio positivo por Trimetazidina, que entró en su organismo a través de la contaminación de la melatonina que tomaba para el jet lag.
Ambos casos han sido muy criticados en el mundo del tenis, con voces de jugadores como Nick Kyrgios, Denis Shapovalov y Simona Halep. Sinner escapó sin enfrentarse a sanciones, mientras que Swiatek aceptó una suspensión de un mes, que cumplió -sin que el caso se hiciera público- saltándose la gira por Asia. Tras regresar al Tour, le quedaba una semana de suspensión, que cumplió durante la primera semana de la temporada baja.
Tanto Sinner como Swiatek fueron declarados inocentes de cualquier delito intencionado; sólo la jugadora polaca fue suspendida debido a su falta por comprar melatonina en una tienda no autorizada por la ITIA. Adrian Mannarino respondió a una entrevista concedida a RMC Sports, en la que compartió su opinión sobre el asunto.
"Ya no creo en Papá Noel. Si hay quien quiere creer, que crea, pero no es mi tipo. Estoy dispuesto a concederles el beneficio de la duda, pero sigue siendo muy sorprendente porque esta temporada ha habido dos positivos entre los 300 mejores del mundo, y son los dos números 1 del mundo."
"Así que entiendo que alguien pueda tomar inadvertidamente la píldora o la vitamina equivocada, pero sigue siendo todo muy sorprendente. Me levanto cada mañana a las 36 cojeando. Tener que salir a la pista contra jóvenes de 20-25 años, si no están limpios, se convierte en algo complicado. Espero por su bien que sea así", concluyó.
Mannarino, de 36 años, volverá a las pistas en 2024 en el Challenger de Numea, donde será el primer cabeza de serie. El francés decidió jugar un torneo de menor nivel en lugar de clasificarse en Brisbane o Hong Kong. Será su único torneo preparatorio antes de viajar a Melbourne para el Abierto de Australia, su 59ª participación en un cuadro principal de Grand Slam.